Joel Carli fue capitán de Botafogo durante ocho años y es considerado un referente eterno del club. Hoy, desde su nuevo rol como coordinador en la estructura del equipo campeón de la última Copa Libertadores, comparte cómo vivió el paso del vestuario a la gestión deportiva.
“Hacer el curso de Dirección Deportiva fue un antes y un después. Me ayudó a descubrir lo que quería para mi futuro”, reflexiona Joel, uno de los más de 300 futbolistas que ya se formaron a través de la diplomatura de FIFPRO Sudamérica.
Su testimonio es una muestra clara de que la formación no solo abre puertas, sino que también redefine caminos. Porque el fútbol no se termina con el último partido: para muchos, recién ahí empieza una nueva etapa.